¿Cómo Colombia puede mejorar en las pruebas PISA?
Más allá de enfoques académicos, es crucial reconocer que existen otros elementos clave para el éxito educativo. Tomemos nota de lecciones de experiencias exitosas, como la de Barranquilla, que ha transformado su sistema educativo a través de un enfoque centrado en la humanización.
En mi libro «El Valor de la Educación,» donde hace unos años destaqué el modelo implementado en Barranquilla, resalté varios de estos puntos que quiero volver a destacar. A continuación, exploraremos diez puntos esenciales para mejorar la calidad educativa con miras a las pruebas PISA:
- Humanización de los procesos educativos:
La felicidad de los profesores se traduce en niños felices. No basta concentrarse solo en los resultados académicos; es fundamental ocuparse primero de los seres humanos involucrados en esos logros: rectores, profesores, estudiantes, padres de familia, acudientes y funcionarios. Humanizar los procesos pedagógicos implica acercarse más a la realidad de las aulas, comprender las necesidades de los educadores y fomentar un ambiente que forme a los mejores ciudadanos desde una perspectiva integral. Escuchar es motivar y acariciar el alma de cada miembro de la comunidad académica.
Si no logramos tocar los corazones, no habrá dinero, pupitres, ni currículos que valgan. Si no apasionas a los seres humanos que se esconden tras el velo de su condición de funcionarios, cualquier inversión será vana. La reforma que propongo es la motivación.
- Conocimiento profundo de la realidad del territorio:
Una educación se torna efectiva cuando logramos comprender la singularidad del aprendizaje de cada niño, identificando tanto sus fortalezas como debilidades. Este proceso, que debe iniciarse desde la primera infancia, cobra aún más relevancia al establecer objetivos y metas adaptadas a las necesidades de cada comunidad. Visitando los colegios, sumergiéndonos en sus condiciones y procesos pedagógicos, y dialogando con rectores, personal administrativo y docentes, garantizamos que los datos recolectados se alineen con la realidad de la institución. Este acercamiento integral implica reconocer que, en ocasiones, es necesario abordar las necesidades básicas y organizar la estructura desde sus cimientos, mientras que en otras instancias, se requiere fortalecer la institución de acuerdo con su misionalidad.
- Mejora de espacios y recursos educativos:
Mejores infraestructuras, accesibilidad equitativa, agua potable, ventilación, iluminación y recursos tecnológicos contribuyen significativamente al bienestar y desempeño académico de los estudiantes y la comunidad educativa en general. Un ambiente agradable es un incentivo para los profes y para los estudiantes.
- Programas de incentivos para docentes y estudiantes:
Reconocer el incansable esfuerzo y dedicación de los docentes y estudiantes nutre una cultura de aspiración en la comunidad educativa y se convierte en un motor de motivación. Para aquellos estudiantes en situaciones de vulnerabilidad, estos programas pueden abarcar desde medidas prácticas como el transporte escolar hasta el estímulo y desarrollo de sus talentos individuales.
Para los rectores funciona promover una competencia sana por lograr destacados resultados en pruebas Saber o PISA, o en brindarles apoyo para mejorar la calidad de sus instituciones a través de un compromiso mutuo.
En lo que respecta a los profesionales de la educación, la atención focalizada en programas de bienestar docente resulta esencial. Proporcionar oportunidades para adquirir nuevos conocimientos, especialmente en procesos educativos actualizados y modernos, fortalece su capacidad para inspirar y guiar a los estudiantes. Estas estrategias, preferiblemente implementadas in situ, facilitan que los educadores se despojen de esquemas tradicionales y abracen cambios en su enfoque pedagógico.
- Promoción de la lectura crítica y las matemáticas en profes y alumnos:
Fomentar tanto la lectura crítica como los procesos matemáticos y lógicos, mediante el acompañamiento in situ y la creación de clubes de lectura, promueve habilidades cognitivas fundamentales.
Recuerdo que cuando fui Secretaria de Educación, comenzamos por identificar qué tenían en común los colegios mejor calificados y qué características compartían los peor calificados. Descubrimos, por ejemplo, que en los colegios mal calificados, el problema radicaba en que los estudiantes de bachillerato tenían bases muy débiles en lectura y matemáticas. Por lo tanto, estos dos aspectos no solo son herramientas educativas, sino también medios para desarrollar el pensamiento crítico y lógico
- Programas de Refuerzo y Nivelación Escolar:
Implementar programas específicos para fortalecer y nivelar el rendimiento académico de los estudiantes asegura la igualdad de oportunidades. Sesiones de orientación profesional, espacios para reforzar conocimientos básicos, talleres sobre pruebas PISA y Saber, así como apoyo transversal, potencian las habilidades tanto de estudiantes como de profesores
- Convivencia y papel de la Familia:
La corresponsabilidad es fundamental en el sector educativo. El apoyo mutuo entre los colegios y las familias, respaldada por el apoyo psicológico, contribuye a un ambiente educativo que promueve el desarrollo emocional de los niños.
Acompañar a los estudiantes en el ámbito psicosocial es esencial en la educación, especialmente en entornos vulnerables, donde las dificultades suelen arrastrar problemas de violencia, matoneo, acoso sexual, trabajo infantil y delincuencia, entre otros factores que inciden en su comportamiento y en su formación como persona. Esto se puede lograr con programas de psicoorientadores que estén capacitados para lidiar con problemas como consumo de drogas, embarazo adolescente o depresión.
- Alimentación como fuente de desarrollo:
Como me dijo una vez un rector, nadie aprende con hambre. Garantizar una adecuada alimentación, brindado al estudiante merienda y almuerzo, contribuye al desarrollo físico y cognitivo de cada niño. Un estómago lleno facilita el aprendizaje y reduce las barreras que impiden el rendimiento académico.
- Diseño de mallas curriculares integrales, coherentes y adaptadas a contextos:
En este punto me voy a extender un poco porque es esencial y aun falta mucho por avanzar en el país.
La colaboración estrecha con cada colegio para ajustar los currículos a sus contextos específicos es esencial. Al trabajar en estrategias de planeación estratégica personalizadas, con enfoque detallado y considerando la singularidad de cada institución, se fomenta la motivación tanto en estudiantes como en profesores.
Así como cada persona es un mundo, así también cada colegio tenía su propia geografía y su propia individualidad, un modo de ser y de expresarse que no solo debíamos respetar sino enriquecer.
El desarrollo de mallas curriculares por campos de conocimiento se presenta como un enfoque esencial, ofreciendo una organización coherente de los contenidos y permitiendo una secuenciación lógica y progresiva de los temas. Esta agrupación en campos específicos propicia una comprensión interdisciplinaria y abre la puerta a una educación más integral.
La adaptabilidad de estas mallas a las necesidades locales asegura una educación relevante que tenga en cuenta aspectos culturales y socioeconómicos. La inclusión de habilidades transversales, la consulta a expertos, así como la integración de tecnología, garantizan que los estudiantes no solo adquieran conocimientos académicos, sino que también desarrollen habilidades esenciales para enfrentar los desafíos de la actualidad.
También, es relevante la sinergia entre materias y profesores, el trabajo en equipo y la articulación. La interconexión de materias no solo potencia el aprendizaje sino que también asegura que no se pierda potencial. Similar a una empresa bien coordinada, donde cada elemento se conecta para un funcionamiento armonioso.
- Programas de Doble Titulación con el SENA y Universidades:
Conectar los conocimientos con la proyección laboral y el cumplimiento de los sueños de cada estudiante se logran incentivando el acceso a una educación superior de calidad. Desarrollar programas de doble titulación con el SENA y universidades es clave para fomentar carreras enfocadas en la innovación y la tecnología. Esta estrategia busca no solo ampliar las opciones educativas, abarcando desde estudios técnicos hasta profesionales, sino también motivar a los estudiantes al conectar directamente sus estudios con el mundo laboral.
Personalmente, he visitado colegios para hablarles a los estudiantes de décimo y undécimo grado sobre las diversas oportunidades disponibles, ayudándoles a visualizar y perseguir sus proyectos de vida. Este acercamiento directo es importante para superar la percepción de inaccesibilidad a estudios superiores que algunos estudiantes pueden tener.
- La educación del presente y el futuro: inglés y nuevas tecnologías
La preparación para el futuro laboral es un pilar crucial para el éxito de los estudiantes. La incorporación del inglés, otros idiomas de relevancia global, la programación, ciencia de datos y las nuevas tecnologías no solo es un imperativo educativo, sino una estrategia clave en la formación de estudiantes preparados para enfrentar los desafíos de este mundo cada vez más globalizado y digital.
No es una tarea difícil. Barranquilla ya lo hizo y lo sigue haciendo, ha demostrado que la colaboración activa con la comunidad educativa puede transformar positivamente el sistema. Humanicemos la educación, motivemos a docentes y estudiantes, y veremos un impacto positivo en las pruebas PISA y, lo que es más importante, en la formación de ciudadanos preparados para enfrentar los desafíos del presente y futuro del país.
